
Hace unas semanas me volví a encontrar con esta imagen, que es mientras estaba en un receso entre clases cuando cursaba la prepa. Ya van a ser catorce años de esta foto y no sé por qué razón la tomé. Es un instante congelado de uno de los lugares favoritos del campus; la explanada. Resulta que hay otros tres posts (Soda infinita, Inercia y Johnny famoso) que he escrito donde menciono este lugar, pero nunca había mostrado una imagen. En realidad, no tengo un buen ejemplar de esta icónica locación, solo esta mala foto que capturé en un momento random. Con el tiempo me di cuenta de que aquí sucedieron muchas cosas interesantes que me marcaron hasta el día de hoy. Ya he escrito sobre esto en los posts que cito aquí, pero ahora solamente quería mostrarles cómo es que se mira este lugar. La cosa es que el grupo de amigos no se juntaba exactamente desde la perspectiva que da la imagen, hay que irse a la esquina de arriba a la izquierda para encontrar en el otoño del 2008 a una bolita de emos y metaleros conviviendo bajo un árbol. Ahí nos juntamos casi a diario durante los dos semestres que nos tocó tomar clases en ese lado de la escuela. Toda esta interacción se daba durante una hora al día, que es cuando los del turno matutino salíamos y los del vespertino entraban. Después de que terminó el primer año de cursos, distintos subgrupos surgieron (por lo general por el salón que les tocó) que raras veces llegaron a interactuar de nuevo entre ellos, solo que no como antes. Este gran grupo de amigos surgió por una pequeña coincidencia que en su momento no me pasó por la cabeza. La historia va más o menos así: en la primaria tenía un mejor amigo, que se fue a otra secundaria por tres años, por lo que el contacto se perdió casi por completo. Al entrar a la prepa vi que él también estaba ahí, por lo que fue natural volver a juntarme con este cuate. Lo interesante fue que cada quien generó su bolita de amigos en la secu y que se llevó a la prepa también. De esta manera fue que sea inició con el supergrupo; cada quien fue invitando a más gente hasta que ya no había lugar para más. En fin, durante este año de reuniones se generaron muchas memorias, anécdotas y lindos proyectos como el de la banda de covers de la que fui parte. Ahora solo queda rendirle tributo este lugar y mandarle un caluroso saludo a la banda. Ich vermisse euch alle!
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